En Golpejar de la Sobarriba, una localidad vecina a León y considerada un pulmón importante de la ciudad, se encuentra la casa de madera donde viven Lola Moreno y Julio Ferreras. “La idea de construir una casa de madera, con un proyecto de bioconstrucción, es una consecuencia de nuestra manera de ver el mundo y de nuestra forma de vida, de la necesidad que sentimos de respetar el medio ambiente, enormemente deteriorado”, afirman Lola y Julio.


La casa de madera de Lola y Julio, de firma finlandesa, cuenta con todos los certificados de garantía de una gestión sostenible de los bosques, del tratamiento de la madera, de aislantes contra el fuego, etc., y emplea únicamente materiales respetuosos con el medio ambiente, además de criterios de ahorro energético. “Desde que vivimos en ella hemos comprobado un ahorro de entre el 30% y el 40% en el consumo de energía”.


Situada entre los ríos Torio y Porma y rodeada de pinares, robles, encinas, chopos y vegetación típica de monte bajo, la vivienda de Lola y Julio es un ejemplo de equilibrio entre calidad de vida y respeto por la naturaleza.